Las tintas que se utilizan cotidianamente en nuestra vida, como los cartuchos de impresora, lapiceras, etc, se encuentran formados a base de químicos tóxicos e inorgánicos,que son perjudiciales para nuestra salud. Al romper inconcientemente una lapicera (por ejemplo), la tinta por la que se encuentra fabricada entra a nuestro organismo provocando intoxicaciones y mareos. Otro claro ejemplo puede ser al desechar los cartuchos de impresora con restos de tinta dentro; estos mismos terminan afectando a nuestro medio ambiente ocasionando daños sobre el agua que bebemos día a día, entre otros.Nuestra propuesta es crear una tinta biodegradable elaborada a base del bioetanol producido por la fermentación de frutas y verduras a la par de productos cotidianos no contaminantes que logren reemplazar la tinta comercial.